LA PRUEBA CUÁDRUPLE ROTARIA, ÉTICA Y CONCIENCIA MORAL
La mentira o la verdad a medias, se ha enseñoreado de la Sociedad española y se utiliza para referirse a los graves problemas que nos aquejan, el buen gobierno de las empresas, el terrorismo, el separatismo, las medidas de gobierno, Europa, la Crisis, la globalización, el Cambio Climático y tantos y tantos otros temas con los que se quiere alienar a los ciudadanos para justificar lo injustificable, hablando en lo que se ha dado en llamar, el “lenguaje políticamente correcto” y que en realidad es una mentira, hecha por relativistas sin conciencia moral, a quienes les importan los votos o la dirección de la opinión pública y que una y otra vez, intentan engañarnos, para que les votemos, aceptemos sus impuestos y sus innumerables leyes, muchas de ellas absolutamente injustas, y con las que nos tenemos que regir en la vida del día a día. Todo esto se podría evitar con la aplicación por parte de todos los ciudadanos, rotarios y no rotarios con la prueba cuádruple de Rotary. La conciencia moral, desde la antigua Grecia fue preconizada, por el llamado triple filtro de Sócrates, quien gozaba de alta reputación y admiración por sus conocimientos. Un día un conocido encontró al gran Maestro en la calle, y le dijo: “Sócrates, ¿usted sabe lo que he oído acerca de un amigo suyo?” “Un momento”, replicó Sócrates. “Antes que me diga algo, quiero ver si usted supera una pequeña prueba. La llaman prueba del triple filtro”, “Antes que me hable de mi amigo, es una buena idea tomar un momento y filtrar lo que usted va a decirme. El primer filtro es la verdad. ¿Está Ud. absolutamente seguro que lo que va a decirme es verdad?”. “No”, dijo el hombre, “realmente sólo lo oí y...”. ”Muy bien, replicó Sócrates. “Entonces usted no sabe realmente si es verdad o no. Veamos el segundo filtro, el filtro de bondad. ¿Lo que me va a decir de mi amigo es algo bueno?. “No, al contrario...”Entonces –prosiguió Sócrates– me va a decir algo malo de él, pero usted no está seguro de que sea verdad. Todavía falta un filtro: el de utilidad. ¿Lo que me va a decir de mi amigo es útil para mí?”. ”No, realmente no.”. ”Bueno”, concluyó Sócrates, “si lo que me va a decir no es ni verdad, ni bueno, ni aún útil, ¿Para qué me lo quiere Ud. decir?”. Este concepto, que se siguió aplicando muchos siglos después, es uno de los códigos de ética más populares y citados que hay en el mundo, la Prueba Cuádruple Rotaria. Fue hecha por el Rotario Herbert J. Taylor en 1932 cuando le pidieron que asumiera el mando de la empresa Aluminum Company en Chicago, que estaba al borde de la bancarrota y buscó la forma de salvar a esta empresa, hundida en una depresión por motivos financieros.
Herbert J. Taylor, fue Presidente de Rotary International en 1954-1955. Bajo este código de ética consistente en 21 palabras, para que todos los empleados lo llevaran a cabo en sus propias ocupaciones dentro de la empresa, logró sacar a flote a la compañía: 1º ¿Es la verdad? • 2º ¿Es equitativo para todos los interesados? • 3º ¿Creará buena voluntad y mejores amistades? • 4º ¿Será beneficioso para todos los interesados? Si aplicara a los negocios, a las amistades, a las Instituciones, al secesionismo, al terrorismo, a la política o al “despotismo ilustrado” con que se gobierna España, o con que se desgobierna, a las manifestaciones de los múltiples grupos sociales, afectados por la Crisis, o a las sentencias de los Tribunales, controlados por el poder político, o a los Bancos, inmersos en unos 530 embargos diarios de viviendas, compradas a precios que hoy ya no valen, y que hacen de estas situaciones una tragedia nacional, o a las medidas “teóricas” para generar empleo, o a las situaciones de inopia que llevan a los nuevos pobres a los comedores de “Caritas”, o a ese millón y medio de familias con todos sus miembros en el paro, etc. etc. Las cosas cambiarían radicalmente, pues estaríamos obrando con Justicia, Ética y Conciencia moral. Asimismo, con este simple código, nos daríamos cuenta que vivimos en un Estado de falta de conciencia moral, donde la mentira nos rodea y nos asalta desde los medios de comunicación, que son auténtica basura intelectual y moral, que vivimos alienados como corderos y que hemos renunciado a los valores de la verdad, de la solidaridad, de la camaradería y la amistad, del benefi cio para los demás antes que el nuestro, del esfuerzo, del mérito y de la lucha por la vida y por un mundo mejor. Ética, es un problema de ética el que nos aqueja, y que conste que no hablo de Religión, aunque preferiría la Ética cristiana a “ninguna ética”, al fin y al cabo, este es un país católico desde muchos siglos.
Inma Castilla de Cortazar, en una magistral Conferencia en el CEU, aplicándose al terrorismo, nos dijo que mientras hubiera alguien, que no aceptara los argumentos más comunes para justificar la tregua con ETA, pactada por el PSOE, no solo existiría un valladar, de conciencia moral que impediría que la mentira prevaleciese, sino que, realmente mientras que ETA o el PNV, no se dieran cuenta de donde estaba la verdad, no cabría ni el arrepentimiento, ni la remisión histórica de la culpa para los delincuentes, que seguirían viviendo con ella. Es decir que sería imposible la desaparición de ETA, en tanto todos no creyéramos, incluidos los terroristas, los presos y sus familias que habían hecho el “mal” y no el bien. Sin conciencia moral sería imposible la remisión de la culpa, del “reato”, de la atrición, ni de la contrición y por ello nunca desaparecería el daño infligido, ni el abrazo de “Vergara” que diera fin a la agresión unilateral, para consuelo de las víctimas, y de toda la sociedad española “victimada” a su vez. Bastaría con que una sola persona o pequeños grupos como los rotarios, con su prueba cuádruple, se negaran a aceptar este engaño, para que se terminase con ese cáncer que aqueja a nuestra sociedad y que ninguna muerte acabará con él, por siglos que pasen en adelante. Por mucho que la sociedad vaya olvidando, el origen y los métodos de aplicación asesina, de estas doctrinas a las que se pretende disfrazar de “guerras independentistas”, como ha ocurrido con el genocidio de los bosnios por los serbios. Nunca un tribunal Internacional, conseguirá terminar con el problema, por mucho que castigue, mientras esa lacra de falta de conciencia moral, no sea aceptada, como culpa real por aquellos que la originaron. Bastaría con que alguien le dijera, por ejemplo a Artur Mas, en Catalunya ¿Por qué mientes? ¿Por qué quieres llevar a los catalanes nuestros hermanos, al precipicio de una secesión, que ni es verdad, ni es equitativo, ni hará amistades, sino odios profundos, y no les aportará ningún beneficio, para que el valladar exista mientras no se acepte la culpa, por la busca ególatra de más votos? Así se fracasa. Winston Churchill dijo “Se puede engañar a todo el mundo durante un tiempo, y se puede engañar a una parte de la gente durante todo el tiempo, pero no se puede engañar a todo el mundo todo el tiempo” y si no que le pregunten a Rubalcaba, gestor de las cenizas del imperio Zapatero, quien tiene que hacerse a sí mismo y al PSOE un severo examen de conciencia moral, de su culpa y de cómo tiene que pagarla, lástima que tan controvertidos personajes no conocieran la prueba cuádruple y peor sería que aun conociéndola, no la hayan aplicado jamás. La Mala gestión de la política por el daño que hace a toda la sociedad debería estar condenada no solo con multas sino con cárcel. A ver si ya que no tienen Ética, ni conciencia moral, por lo menos tienen miedo al castigo en este mundo, lo curioso es que no solo no se les juzga, sino que se les premia con sinecuras de dorado retiro.
BERNARDO RABASSA ASENJO
PRESIDENTE DE HONOR Y DE RELACIONES EXTERIORES DEL CLUB LIBERAL ESPAÑOL.
PRESIDENTE DE LA FUNDACIÓN FIECS INSTITUTO EUROPEO PARA LA COMUNICACIÓN SOCIAL.
INTERNATIONAL REGIONAL COMMODORE OF IBERIA OF IYFR ASSOCIATE MEMBER OF ELDR
(EUROPEAN, LIBERAL, DEMOCRAT AND REFORM PARTY) DE LA UNIÓN EUROPEA.
C/ Isla de Oza 9. (Ptª de Hierro) 28035. Madrid
Tel. +34 913 738 183 • Móv.+34 607 866 269 • Mail bernardorabassa@hotmail.com